. A las 11:00 dan la salida, y me quedo sólo durante una media hora hasta que logro alcanzar a Manolo Ortega. El día estaba nublado, km 10 pasé por el control de paso. Mi olfato se iba impregnando de los olores de unas preciosas plantas aromáticas a cada paso que daba. Cuando seguía corriendo por el km 17, ahí alcanzo a mi amigo y compañero Pepe Roldán. Con él pasé un tiempo de la carrera hasta que supere su ritmo y lo pasé, llegando así solo hasta a la línea de meta, con una marca de 01:54. Una vez pasada la línea de meta consideré volverme para acompañar y ayudar a mis hermanos pretorianos a que consiguieran su objetivo; llegar a la meta .
En está ocasión al que más ayudé fue a Cheilor.
Luego nos fuimos a los coches a cambiarnos y alas 13:50 ya nos tomando unos
“zumitos de cebada” para hidratarnos con mi gente después de un gran esfuerzo.
Después fuimos acompañando a Emilio a recoger su merecido premio a la
deportividad. A las 14:20 nos fuimos a buscar la paella, ¡y a comer se dijo!
Eran las 15:20 cuando terminamos de comer, y en ese momento Emilio entregó su
premio conseguido en el Cross de Itálica la semana anterior para que luciera en
la sede del club. Cuando eran las 15:50 cambiamos de tercios y pasamos a los
combinados. A las 16:30 seguíamos con los combinados y empieza los momentos de
las inspiraciones de los compañeros.
Los compañeros empezaron a contar sus vivencias y
experiencias, cuando terminamos de tomar copas nos fuimos rumbo a Gelvéz pera
seguir con los combinados y las cuñas de Carmen. Son las 18:00 h y seguíamos
alternando. Así estuvimos hasta última hora cuando nos marchamos cada uno para
casa. Dejando un día atrás muy bueno, ¡espero que se vuelva a repetir!
Un salu2.e EL NIÑO.
que bien te lo montas ,pishita.eres un crack
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